Sobre protector

¿Cómo podía haber sido atacado por un vampiro, y no ser uno de ellos?
-Como… ¿Puede ser que te hayan atacado y no seas uno de ellos?
No lo comprendía. Si, podían haber succionado en la herida y haber extraído la ponzoña, pero, ¿y el don?
Se me quedó mirando fijamente.
-La ponzoña no hace efecto en mi cuerpo. Pero de alguna forma, cuando fui atacado, me fue transmitido el don de aquel vampiro.
Qué extraño… Jamás había escuchado algo así. Nos quedemos un rato en silencio, pero no uno incomodo, se estaba a gusto.
Mis temores se habían esfumado, por lo que ya no me convulsionaba.
Jorge se acercó mi lentamente, creo que tenía algo de miedo por lo que yo le pudiera hacer. Cuando ya estaba a dos pasos de mí, mientras se volvía a poner la camiseta, algo lo asustó y se echó para atrás rápidamente.
Me lo quedé mirando extrañada pues yo no le iba a hacer nada. Entonces supe que no estaba así por mí. Giré la cabeza y ahí estaba. El enorme lobo de pelaje rojizo enseñando los dientes.
-Jacob, tranquilo.
Pero no me hacía caso, cada vez se acercaba más.
-¡Jake!
Entonces reaccionó. Se me quedó mirando precavido mientras miraba de reojo a Jorge. Le hice un gesto para que saliera de fase y poder hablar.
Se fue detrás de los arbustos y a los pocos minutos salió en pantalones cortos.
-Es el que me has dicho antes, ¿cierto?
-Si soy yo mismo. Me llamo Jorge.
Jacob se quedó parado sin saber cómo sabia tanto y me miró con el ceño fruncido.
-Jorge tiene un don. Puede ver el pasado de la gente con tan solo mirarla a los ojos.
Jake se quedó con la boca abierta de par en par. No pude evitar reírme de su cara. Era gracioso hasta cuando no se lo proponía.
Le expliqué todo, sobre que Jorge había sido atacado, que su cuerpo rechazaba la ponzoña y todo lo demás.
-No me fío.
Puse los ojos en blanco. Se había situado delante mío como… ¿Protegiéndome? Jacob Black protegiéndome… Esto era nuevo.
-No te acerques a Leah, ¿te queda claro?
-Jake, te estás pasando. ¿Desde cuándo intentas protegerme?
-Desde que acabé en una cama con todos los huesos rotos por tus imprudencias.
Eso no valía. Me había echado en cara algo que sucedió hacia como mínimo dos años, cuando luchemos contra los neófitos. Para aquel entonces yo era mas cría que ahora. Se había pasado.
Agaché la cabeza tristemente y me dispuse a irme.
-Leah, entiéndeme… Te has convertido en alguien importante para mí.
Paré en seco. Eso era imposible. Vale, Jacob era el único que me comprendía, que comprendía por lo que yo había pasado, pero de ahí a que fuera una amiga para él, algo importante…
-Eres una gran amiga para él.
Dijo Jorge.
Lo fulminé con la mirada y este agachó la cabeza.
-Perdón.
-Mira Jake, no te metas en mi vida… Por primera vez alguien se acerca a mí aunque tenga esta estúpida actitud, ¿y tú no me dejas acercarme a él?
-Solo hay una forma de que nos podamos fiar por completo de él. Y para ello necesitamos a Alice y a Edward.
Puse los ojos en blanco. Lo que faltaba, ahora tenían que estar por medio esos dos.
-Como quieras.
Dije desesperada. Si con eso conseguía que dejara de meterse donde no debía…
Fuimos los tres caminando desde el riachuelo hasta casa de los Cullen. Al llegar no dio tiempo a picar a la puerta que Carlisle ya la había abierto.
-Hola chicos.
-Hola Carlisle, ¿Qué están Edward y Alice?
Preguntó Jacob sin rodeos. Este asintió y señaló el piso de arriba. Entremos rápidamente y subimos las escaleras. Al llegar a la habitación de Alice picó.
-Adelante.
Dijo alegremente. ¿Cómo podía estar siempre tan feliz?
Entremos y ahí estaba Alice hablando con Bella. Ambas nos miraron sorprendidas.
-Hola Alice, Bell’s.
Dijo Jake simpáticamente acercándose a despeinar a Bella. Hay que ver lo amigos que eran a pesar de que Jacob había estado tan enamorado de ella…
-Necesitamos tu ayuda Alice, y la de Edward.
-Edward está con Reneesme en el jardín.
Respondió Bella. Izo ademán de levantarse pero Jake la detuvo.
-No te preocupes ya voy yo, así veo a la pequeña.
Dijo sonriente. Qué suerte de haber encontrado su imprimación… Y yo, aquí sola, con un chico que ni siquiera estaba segura de que fuera del todo humano.